Recibido: 24 de enero de 2024
Aceptado: 21 de marzo de 2024
Publicado: 1 de mayo de 2024
E-ISSN: 2346-3414
Rev Cuid. 2024; 15(2): e3745
https://doi.org/10.15649/cuidarte.3745
EDITORIAL
Universidad Industrial de Santander, Bucaramanga, Colombia. Email: lizeth2191328@correo.uis.edu.co
Lizeth N. Quiroga-Pico
Fundación Cardiovascular de Colombia, Floridablanca, Colombia. Email: andreaaceros@fcv.org
Andrea M. Aceros-Lora
Fundación Cardiovascular de Colombia, Floridablanca, Colombia. Email: tatianadiaz@fcv.org
Tatiana M. Díaz-Castañeda
Fundación Cardiovascular de Colombia, Floridablanca, Colombia. Email: lyda.rojas@correo.uis.edu.co Autor de Correspondencia
Lyda Z. Rojas
Highlights
Como citar este artículo: Quiroga-Pico Lizeth N, Aceros-Lora Andrea M, Díaz-Castañeda Tatiana M, Rojas Lyda Z. Champions en enfermería: cómo transformar la práctica basada en la evidencia. Revista Cuidarte. 2024;15(2):e3745. https://doi.org/10.15649/cuidarte.3745
Recibido: 24 de enero de 2024
Aceptado: 21 de marzo de 2024
Publicado: 1 de mayo de 2024
E-ISSN: 2346-3414
La práctica de enfermería en una organización, es el resultado de los procesos de liderazgo que se desarrollan en pro de la profesión y que se reflejan en cómo se desenvuelven los enfermeros en los equipos interprofesionales y en la calidad de cuidado que brindan a los pacientes1, mientras que, la práctica basada en la evidencia (PBE) hace referencia a la toma de decisiones en el desarrollo y la prestación de servicios de salud de acuerdo con la mejor evidencia de investigación disponible, la experiencia de los proveedores de la atención en salud, los valores y las preferencias de los pacientes; la adopción o implementación de está por parte de las organizaciones puede crear prácticas más seguras, mejores resultados para las personas y disminuir los costos de la atención médica2. En la literatura, se han identificado a los “champions” o “campeones” como determinantes y agentes de cambio para garantizar esta adopción dentro de las instituciones1,3.
La primera aparición del término campeón en la literatura fue registrada en el año 1990, su definición y características se han ido construyendo a través del tiempo1, pero ¿qué es un campeón? un campeón es un enfermero destacado por su desempeño dentro de una institución y que, de forma apasionada, busca mejorar la calidad del cuidado4. Las características de un buen campeón se asocian con buenas habilidades de negociación, abogacía, entusiasmo y energía para dirigir la implementación, entendimiento completo de las iniciativas y del contexto local, enfoque positivo, capacidad sólida de educar y habilidades de comunicación, convencimiento de las iniciativas para el cambio y el compromiso de su ejecución exitosa, además de mostrar su apoyo vocal y visible por estas, asimismo, son personas respetables, con credibilidad y apreciadas por sus pares1,3.
Adicionalmente, los campeones son líderes transformacionales con la capacidad de crear, facilitar y mantener el cambio e influenciar ampliamente la cultura organizacional conduciendo la adopción de las mejores prácticas. En ese sentido, las funciones de los campeones incluyen abogar por las iniciativas dentro del entorno laboral, motivar al personal, involucrarse en la planeación de las actividades, educar, entrenar e inducir al personal acerca de las iniciativas, su importancia y valor, construir relaciones con personas claves, ampliar los límites entre los servicios o unidades, pasar tiempo uno a uno con el personal, reclutar miembros para la implementación, usar datos para convencer a los pares y resolver los problemas que surjan de la adopción de la PBE1,5. También, se ha evidenciado que estos suelen tener mayor permanencia en la organización, experiencia laboral, competencia técnica y conocimiento de la misma6.
Los campeones con mayor permanencia son aquellos con mayor éxito, debido a que están familiarizados con los riesgos y los desafíos asociados a la implementación, tienen mayor habilidad para construir redes de comunicación y entienden los límites en los cuáles opera la organización y las necesidades de cambio6. Sin embargo, debido a las múltiples y diferentes funciones del rol de un campeón, es importante considerar que estas responsabilidades no pueden estar asociadas a un único enfermero dentro de la institución, la literatura señala que varios campeones deben trabajar simultáneamente y de manera coordinada en una sola dirección para que la implementación pueda ser exitosa1.
En la medida que el término ha evolucionado a través del tiempo y en base a las diferentes dinámicas de una organización, el rol del campeón se ha ido adaptando según el servicio, unidad o área, las necesidades específicas de estos entornos o la problemática de interés a abordar1,5. Por ejemplo, se podrían mencionar algunas clasificaciones como a) según su función en la organización: campeón asistencial, campeón de cambio organizacional, campeón administrativo; b) según el tema relacionado: campeón de lavado de manos, campeón de guías y protocolos, campeón de innovación, campeón de PBE y c) según una posición laboral específica: campeón de enfermería, campeón educador, entre otros1,5.
Cabe resaltar, que un profesional puede autoidentificarse como un campeón o ser elegido por sus pares para asumir este rol, que puede ser informal, como también puede ser formalizado. Un campeón formal es típicamente designado por el coordinador de un servicio para ejecutar un proyecto específico, para lo cual recibe entrenamiento y son claves porque están oficialmente asignados a buscar y gestionar mejoras. Por otro lado, un campeón informal, es un enfermero que desarrolla, promueve activamente y entrega un programa o proyecto innovador dentro de su servicio sin ser nominado formalmente a esa tarea, este rol depende de sus recursos personales e influencia, pero también implica mayor flexibilidad y la oportunidad de escoger problemáticas y soluciones prácticas que no necesitan seguir procesos estandarizados4,6. La diferenciación entre la presentación de los campeones no pretende establecer la superioridad de un tipo sobre el otro, si no refleja la importancia de realizar un proceso consciente de selección de estos líderes basados en su experiencia y permanencia laboral, así como en su conocimiento y capacidad en el área de desarrollo de los proyectos, garantizando los recursos necesarios, el apoyo y motivándolos a dirigir proyectos de innovación4. La Figura 1 resume las características principales del rol de un campeón.
En concordancia con todo lo anteriormente expuesto, existen los campeones de PBE, los cuales son enfermeros que promueven la ejecución de intervenciones basadas en la mejor evidencia para el cuidado y el contacto interpersonal que es inherente a su rol y son clave para el éxito en la implementación de la PBE. Para esto, los campeones crean conciencia acerca de las mejores prácticas a través de estrategias educativas y actúan como mentores para los enfermeros, funcionan como líderes persuasivos de la aplicación de la PBE y son los más capacitados para adaptar las estrategias de implementación a la organización. Asimismo, los campeones se encuentran como facilitadores de la sostenibilidad de la PBE en múltiples contextos y en estudios se ha observado una mejora en la adherencia a las mejores prácticas clínicas sólo hasta después de incluir a los campeones4,7,8. Dentro de sus responsabilidades más importantes se encuentran la educación y la comunicación, frecuentemente son vistos como modelos y mentores para sus pares, recolectan datos para evaluar resultados y desarrollar análisis, proveen retroalimentación y abogan por las nuevas ideas, los enfermeros y los pacientes. La educación es un componente crítico del campeón de PBE para promover su adopción y usualmente ocurre uno a uno con los enfermeros a pie de cama y los equipos interprofesionales. Por otra parte, las habilidades de comunicación son necesarias para influenciar la adopción de la PBE y construir relaciones entre profesionales y servicios al interior de la organización, lo que promueve un cambio cultural que sostenga la PBE7,8.
Es necesario considerar que un campeón de PBE implica una serie de competencias y habilidades para su desempeño, como búsqueda de la literatura científica, evaluación de la evidencia y la generación de recomendaciones para la práctica; competencias que con frecuencia no se encuentran dentro del perfil profesional de los enfermeros asistenciales o coordinadores, lo que implica una barrera para la existencia de campeones de PBE en una organización. La evidencia sugiere la necesidad de incorporar enfermeros capacitadas para desempeñar funciones de práctica basada en la evidencia y que, a su vez, se conviertan en educadores de sus pares en todos los niveles de atención, de modo que fortalezcan las creencias de los enfermeros en la PBE y les otorguen las herramientas para realizar una transición exitosa a las mejores prácticas8,9.
Para finalizar, queremos destacar dos investigaciones donde los campeones fueron utilizados para realizar actividades de PBE; es así que, en un estudio realizado en Canadá se determinó la influencia de los campeones de mejores prácticas en la difusión de guías de buenas prácticas, a través de la educación mediante talleres, sesiones grupales de educación y recursos audiovisuales de aprendizaje interactivo, abogando así por la educación de la totalidad del personal. Asimismo, estos campeones también eran percibidos como expertos en las guías y modelos a seguir y trabajaban por medio de un sistema complejo de grupos organizacionales y comités, siendo líderes de equipos interdisciplinarios para facilitar la difusión de las guías. Además, realizaban auditoría, monitorizaban y documentaban los cambios para incorporar las recomendaciones10.
En el otro estudio, campeones de tipo asistencial, implementaron un protocolo de manejo del dolor facilitando sesiones educativas para el personal y educación individualizada, escuchando la opinión de sus pares relacionada con formas de reducir la carga laboral asociada a la implementación del protocolo; enseñando acerca de diagnósticos asociados al dolor, reacciones típicas y atípicas del dolor y manejo farmacológico; ellos a su vez se reunían con frecuencia con los líderes de los servicios para discutir el protocolo y responder preguntas. También, se comprometieron con mantener la adherencia al protocolo por medio de recordatorios en persona y en el tablero de noticias, incorporar en el sistema una herramienta de valoración del dolor y realizar auditorías. Estas enfermeras eran responsables de organizar reuniones interdisciplinarias mensuales para la facilitar el uso del protocolo y resolver problemas derivados de este11.
En conclusión, los enfermeros campeones son figuras claves del liderazgo transformacional y agentes de cambio dentro de una organización, ellos tienen diferentes características y funciones que varían según las necesidades y los objetivos de la organización. Asimismo, ellos pueden autoidentificarse o ser elegidos por sus pares, sin embargo, la institución debe brindar apoyo y recursos que incentiven y favorezcan su liderazgo en la práctica de enfermería, con el propósito de que los diferentes retos asumidos (asistenciales, administrativos, educadores, de PBE entre otros) conduzcan a resultados exitosos en la mejora de la calidad del cuidado y estos sean sostenibles en el tiempo.
Conflicto de Interés: Los autores refieren no tener conflicto de interés.
Financiación: No se cuenta con financiación.
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Referencias
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